* La guía perfecta para no entender la vida de un expatriado, pero pueden intentarlo...

miércoles, 31 de octubre de 2012

Halloween

Guten Morgen, Guten Morgen, Guten Morgen Sonnenschein !

Hoy estamos de fiesta. Las fábricas están paradas y los comercios cerrados, con lo cual el centro está medio vacío, por no decir fantasma; deben de estar todos, primera, segunda y tercera edad, o paseando por el bosque, o visitando por enésima vez el castillo del Wartburg, o haciendo pasteles en casa. Normalmente el centro tampoco es que rezume lo que viene a ser un ambientazo España de rebajas, pero por lo menos la sensación fantasmagórica de hoy desaparece. Principalmente, los sábados por la mañana las tres generaciones se juntan y pasean por la Karlstrasse, de principio a fin y de fin a principio, eso sí, siempre con un Bratwurst en la mano. Debo reconocer que uno no es muy salchichero, pero disfrutar del placer culinario de la auténtica salchicha de Thüringen, hecha en un chiringuito en la calle, tiene su aquel.  Es un poco como el ternasco D.O. de Aragón, pues aquí es la salchicha D.O. de Thüringen. Creo que esto que acabo de escribir es un poco sacrilegio, ustedes me perdonen.

La mañana ha amanecido soleada. Mis queridos vecinos de arriba ('die Königen von Oben'), con su hija de 6 años que es un auténtico amor ('die kleine Ratte') y  los abuelillos entrañables (pareja jubilada que vive en la villa de enfrente), se han ido todos juntos de vacaciones a Gran Canaria para las próximas 2 semanas y media. Venga! para que luego diga 'Frau Merkel' que en Alemania se trabaja más que en España, aunque he de reconocer que mis queridos 'Königen von Oben' tienen estas vacaciones más que merecidas.

En próximas entradas iré explicando las relaciones entre los distintos habitantes de la comuna vecinal, porque tiene su miga, pero os adelanto que el abuelillo entrañable es el ex suegro de mi 'König von Oben'.

La parte buena de esta migración teutona hacia el calor, es que la 'villa' es mía y solamente mía (los vecinos de abajo es como si no estuvieran), y la parte mala, es que los próximos domingos no tendremos nuestro tradicional café sobremesa, siempre coronado con una buena degustación de vino. Pero como diría alguno, que todos los males sean como éste, no?

Aprovechando la agradable mañana, una vez abrazadas todas las aves migratorias, he decido salir a correr por el centro para empaparme de la efervescencia y actividad febril del pueblo, y me he topado, cómo no, con un personaje de la segunda edad con sendos lóbulos de las orejas perforados por cilindros prominentes, y con una pareja de la tercera edad que me ha mirado con cara de odio, y eso que esta vez me había apartado a tiempo de su camino. Algo muy típico de aquí es la inamovilidad de la gente en la calle; prefieren chocar a cederte el paso, pero no tengo todavía una teoría muy definida sobre esta actitud.

En cualquier caso, como os comenté en mi primera y hasta la fecha única entrada de mi nuevo blog, el pueblo en el que resido también fue lugar de residencia y estudio de Luthero y éste, allá por el 1517, decidió distanciarse de la Iglesia Católica, del Papa y de todos sus Santos, haciendo públicas sus 95 ideas reformistas, justo un día como hoy, víspera del día de todos los Santos. Ole! con un par...! Si San Pedro levantara la cabeza...

Total, que por aquí hoy se le hace la ola a Luthero, y lo declaramos día festivo, de nuevo para que Frau Merkel vaya vendiendo estereotipos baratos sobre la, quiero pensarlo así, obsoleta España cañí. Sin embargo, y a pesar de esta ola lutherana, los habitantes de este lindo pueblo de Alemania (del Este), como ya sabéis en su mayoría de la tercera edad, también celebran a su manera, sobre todo por la diversión de los habitantes de la primera edad y porque al final cada uno hace lo que le viene en gana, la noche de todos los santos (All Hallow's Eve) o la más conocida, en el argot comercial americano, todo por la pasta, como noche de 'Halloween'.

Como uno es muy previsor, me he confiscado en el 'REWE', previo pago, de todo un cargamento de 'HARIBO',  por si esta tarde aparecen niños desconocidos en la puerta de la 'villa' cantando extrañas melodías alemanas...  Si así fuere, les daré las gominolas, muy perjudiciales para sus dientes, y les pondré la mejor de mis sonrisas mientras evito la palabra 'Zugabe' (otra, otra, otra!).



*Lutherhaus

Este año no tengo fiesta de disfraces (a Dios gracias), pero no he podido evitar recordar, con cierta risa, la fiesta karaoke Halloween a la que asistí el año pasado junto con otros dos 'españolitos'. Uno estaba recién aterrizado por estas tierras y se apuntaba a todo, y la verdad es que aquella noche dio mucho de sí. Un cavernícola, un esqueleto mexicano y un cura llegando a un chalet lujoso a las afueras de Frankfurt... cómo se titula la película?.... Living la vida Loca! que fue el título de la canción con la que deleitamos a Catwoman, Amy Winehouse, Avatares y demás personajes varios presentes en dicho evento, y con la que obtuvimos nuestros primeros '12 points' de la noche. Este año mi Halloween será mucho más tranquilo, como se nota que los 36 años poco a poco van dejando huella, no facial, pero sí de otro tipo. 

En fin, que viva Halloween, San Pedro y Herr Luthero, y así todo el mundo contento! Yo reconozco que tengo unos cuantos santos venerados, algunos muy personales y otros nada convencionales, y para celebrarlo he decido hacer un 'Brücke' hasta el domingo y desaparecer por unos días de éste mi querido pueblo de Alemania (del Este). El lugar de destino es frío, pero mi teoría es siempre la misma, lo importante no es el lugar donde se va, sino la gente con la que disfrutas de cada día, así que nada... tractor, carretera y manta!

Os seguiré contando...

Feliz Halloween!





lunes, 29 de octubre de 2012

Mi cumple

Muy buenas a todos/as,

Hoy quiero empezar a compartir en este blog mi experiencia vital en un bonito pueblo de Alemania (del Este), cuna de un gran compositor musical como fue Bach, y de la persona que interpretó la Biblia como le vino en gana y ya de paso la tradujo al alemán: Don Luthero, el cual, para defenderse del histórico Carlos I de España y V de Alemania, defensor a ultranza del catolicismo, tuvo que refugiarse en el Wartburg, castillo también sito en este lugar.

Pues sí, en este bonito y pequeño pueblo de Alemania (del Este) estoy desarrollando mi carrera profesional, quién me lo iba a decir a mi!. Yo que siempre me he comido el mundo, por lo menos en sueños, que he viajado, estudiado, conocido gentes y culturas de todo tipo... y que me imaginaba viviendo en Frankfurt, Shanghai, NewYork, o vaya usted a saber dónde, y aterrizo finalmente en esta Metrópoli de la tercera edad en el Este de Alemania. 

Los de la primera y segunda edad, que haberlos también los hay, se dejan ver con menor frecuencia, pero cuando los ves, prepárate porque algún que otro susto te puedes llevar. Buena parte de ellos poseen un denominador común que consiste en lucir tatuajes de grandes proporciones, rastas elaboradas en complejas perillas, y piercings, o más bien aros de todo tipo y tamaño, y que le hacen sentirse a uno 'selbst', como diría el gran doctor Iglesias que en paz descanse, raaaro, raaaro, raaaro... 

Nunca olvidaré un viernes tarde en el Irish Pub del pueblo -porque tenemos Irish Pub- tomando una cerveza con un compañero del trabajo, 'españolito' como yo y perdido en el mismo lugar, la sensación total de estar en el bar de Star Wars, donde los elefantes, rinocerontes y especies marcianas varias se mezclaban entre litros de cerveza. Pues igual! nunca habíamos visto tanta gente variopinta junta. No tengo absolutamente nada en contra de la gente dispar, pero mi compañero y yo, como 'españolitos' de pro, desentonamos esa noche más que el nieto del anteriormente mencionado doctor Iglesias.

Llevo más de un año viviendo aquí, y sinceramente mi vida ha dado un vuelco de 180º, donde no existen las rutinas y donde la palabra surrealismo toma todo su significado. Mi padre todavía cree, o quiere creer, que su hijo está viviendo al lado de Frankfurt, el gran centro financiero europeo, y como realmente sólo vivo a 2h en coche del Banco Central Europeo...  pues he decidido no quitarle la ilusión. 

Pues eso, que en este lugar del Este de Alemania celebré el sábado pasado que un día como aquel, pero hace 36 años, mi madre me trajo a este complejo y divertido mundo, cierto es que a 1807km de distancia del lugar desde donde hoy empiezo a escribir este blog.

La celebración, que fue conjunta con mi querido vecino de arriba, der König von Oben (yo soy el König von Unten) fue una celebración de esas donde tiras 'la villa' por la ventana, porque sí, vivo en una bonita villa de inicios de siglo XX, eso sí muy bien restaurada y aislada, porque sino cualquiera aguanta este frío. 

El sábado amaneció blanco, gracias a una nevada espectacular típica de finales de Octubre, vamos, que pilló a todos los 'alemanitos' en bragas y todavía  con los neumáticos de verano en el coche. Yo debo reconocer que ver tanta nieve el día de mi cumpleaños me dio un subidón emocional considerable, últimamente muy necesitado, y lo primero que pensé, recién levantado de la cama , fue aquello de 'año de nieves... año de bienes'. Así que, por decisión unánime, y siempre según el sabio refranero español, que para eso soy 'españolito', mis 36 años van a estar llenos de bienes.

El concepto bienes es muy amplio pero vamos que me conformo con poder seguir disfrutando de muchos momentos llenos de risas como los vividos en mi primer año en Alemania (del Este).

La fiesta fue muy divertida, con toda la comuna vecinal teutona de villas colindantes presente, así como el resto de españolitos expatriados, sin duda un gran apoyo moral. Comimos 'gulash' o cocido de jabalí y cervatillo hecho lentamente en el fuego del jardín; ahí estábamos todos copa de vino en mano aguantando las gélidas temperaturas, todo por el 'gulash' y por mi querido vecino, fiel a su tradición anual de hacer el 'gulash' en el jardín. Mi gran aportación al convite fue de máxima originalidad, tortillas de patata, queso manchego curado, ensaladilla rusa (muy apropiada para el frío) y mucho vino español (en próximas entradas os recomendaré alguno de mis favoritos). De postre, mojitos (en honor a mis queridos amigos mexicanos, back in USA).

Hay quien tiene plantaciones de marihuana en sus casas, yo reconozco que tenemos toda una plantación de menta, la cual quedó bastante deforestada el sábado pasado. La noche se fue desarrollando con buena parte de la comuna vecinal teutona sentada en el sofá observando al detalle, cómo los 'españolitos' y algún que otro teutón españolizado (die Königen von Oben)  bailaban y taconeaban sin ningún tipo de pudor, me imagino que ante el cabreo de los vecinos de abajo, que no estaban invitados (Ende). También soplamos velas del Ikea sobre una tarta de Santiago espectacular, cortesía de 'españolita' auténtica en pleno proceso de integración, y bailamos todo lo bailable, sevillanas incluidas,  hasta altas horas de la madrugas (1am), no nos olvidemos que estamos en Alemania (del Este). 

El día después, mientras una parte de la población de la tercera edad se dirigía a la Iglesia del pueblo a leer o escuchar la versión de Luthero, nosotros nos unimos a la parte de la población que le gusta andar por el bosque. Si algo no nos falta aquí, son bosques frondosos e interminables, y digo interminables, porque literalmente nos perdimos en mitad del bosque y nos llevó más tiempo del planeado volver a casa.

Pero siempre quedará en nuestra memoria, y en las cientos de fotos que hicimos, las postales idílicas que nos regaló el bosque; verdes, marrones y amarillos, en todas sus tonalidades, reluciendo en todo su esplendor entre la nieve caída el día anterior. Tengo que decir que fue todo un ejercicio para un daltónico como yo, que no distingue el verde del marrón.

El subidón del sábado continuó el domingo ante semejante espectáculo otoño-invernal, y en honor al delicioso 'gulash' que nos metimos entre pecho y espalda la noche anterior, acabamos cantando al son de la famosa ópera napolitana de Peppino Turco y que tan famosa hicieron los tres tenores: guliguli guligulash, guliguli guligulash.... lalalala, guliguli guili gulash!! Yo creo que por eso nos perdimos en el frondoso bosque.


La felicidad no es cuantificable, pero desde luego que lo vivido este fin de semana ha aportado una buena dosis de energía positiva a mis reservas. El fin de semana ha terminado esta mañana a las 7am, cuando al coger el coche para ir a trabajar con una agradable Tª ambiental de -5ºC, me doy cuenta que estaba la ventanilla del copiloto abierta y todo el coche helado, por dentro y por fuera. Yo, sin Kratzer, o rasqueta de toda la vida para quitar el hielo del parabrisas, así que calefacción a tope, me he echado unas buenas risas y cuando se ha descongelado todo, me he ido a trabajar... 

Como dicen por aquí, das Leben geht weiter (la vida sigue).

Eine schöne Woche!!!

Der König von Unten