* La guía perfecta para no entender la vida de un expatriado, pero pueden intentarlo...

sábado, 2 de febrero de 2013

1h25': La ruta de la Halbmarathon

La idea de inaugurar la ruta de la 'Halbmarathon' en Alemania surgió, básicamente, de un 'brainstorming' interno realizado con uno 'selbst' y apoyado en la teoría de la compensación, esto es, la búsqueda del equilibrio entre vida sana y vida loca.

Recién aterrizado en estas frías tierras del Señor (o de Dioniso), mi nueva vida de expatriado, surrealista en grado máximo, me pedía a gritos empezar a aplicar urgentemente la mencionada teoría de la compensación, me imagino que por algún ligero desequilibrio observado, y así fue como comenzó todo:

1) Frankfurt: 1h25'

Frankfurt es una de mis ciudades favoritas, de hecho, negocio con Lola para que me la incluya en su bola de cristal como posible destino el día que cierre este blog, así que elegí esta ciudad para la premier del 2012.
La particularidad del estreno fue que la noche anterior al evento atlético, en lugar de estar estirando y descansando, asistí al fiestón-fiestón de cumpleaños de un compañero del trabajo, vamos, justo lo que recomiendan todos los manuales del buen corredor. El party animal estuvo muy controlado toda la noche, y eso que estaba mi querido 'Teufelcillo' merodeando, pero el día después lo pagué al contado, y bien pagado, en forma de cansancio.
Eso sí, el circuito fue precioso, a lo largo del río 'Main' y con vistas al Skyline financiero de la ciudad. Día desapacible, mucho sueño, pero motivación a tope, y tras mucho esfuerzo cruzaba la línea de meta, con las mejores de mis zancadas para los fotógrafos, en un tiempo de 1h25'!

Ya quedaba poco para mi llegada pseudo-triunfal
2) Praga: 1h25'

La capital a orillas del río Moldava tiene fama de ser una de las ciudades más bonitas de Europa, así que, aprovechando que el 'pueblucho' donde vivo está a 4h en tractor de la misma, metí las zapatillas en la maleta y me fui a hacer su correspondiente 'Halbmarathon'. Precioso centro histórico, confirmo su fama, pero eso de correr sobre las calles adoquinadas y con las vías del tranvía por el medio, no se lo recomiendo ni al amigo Murphy...
Eso sí, ambientazo total por las calles, tropecientosmil corredores inscritos, gacelillas africanas profesionales contratadas, y uno 'selbst' sintiéndose el rey del mambo entre tanto atleta europeo. Climatología de mierda  adversa, pero aún y todo, este españolito consiguió cruzar la línea de meta, como siempre dedicando unas últimas zancadas de máxima amplitud para los fotógrafos, en un tiempo record de, sorpresa, 1h25'!

Vista de Praga desde el castillo. Durante la carrera, Murphy nos regaló una agradable llovizna y un viento facial muy rejuvenecedor

3) Mainz: 1h25'

Esta carrera nunca la olvidaré porque en ella conseguí mi plusmarca personal. Cómo lo conseguí?, pues ni repajolera idea, porque les confesaré que la noche anterior nos fuimos de mojito (en singular) con unos amigos españolitos y el cumpleañero de la premier.
El día de la carrera comenzó diluviando, ya saben, el amigo Murphy que es un cachondo... Pero conforme fue avanzando la carrera, el sol se fue asomando, y las banderas de España fueron ondeando en manos de los amigos españolitos varios, al son de alegres cánticos patrios, oigan, que uno se fue creciendo, o más bien acelerando, y sacó ese puntito de más, que todavía no sé muy bien de dónde salió, pero que me hizo llegar a las fotogénicas amplias zancadas finales en tiempo récord: 1h25'! Subidón, subidón...

Los amigos españolitos me llevaron en volandas...

4) Stuttgart: 1h25'

Aquí me lesioné. Uno, que no se lo podía haber currado/entrenado/trabajado más durante toda la primavera, llegaba a Stuttgart con los ánimos por las nubes; muchas carreras acumuladas, muchos kilómetros en las piernas, zapatillas nuevas, alimentación adecuada (por lo menos la última semana), nada de mojito la noche anterior, desayuno proteico, hidrato-carbonado y repleto de líquidos isotónicos y super mineralizados...
Total, que empezó la carrera y unos retortijones de tripa me mantuvieron entretenido los primeros veinte minutos; no podía dejar de pensar en otra cosa que no fuera en cómo y dónde vaciar mi estómago. Inesperadamente, el cuerpo lo absorbió todo, los retortijones cesaron, y pude continuar la carrera como si nada, recuperando la ilusión de superar la barrera del sonido, digo de la 1h25'...

Estoy en la tercera fila a la derecha de su lectura...

Los tiempos intermedios me permitían realmente seguir soñando despierto..., pero no, ni Murphy, ni Lola estaban por la labor! Esos kilómetros finales que no terminan nunca: "Seguro que han medido mal las distancias!!". El teutón que te adelanta y escupe a tu lado: "Cabrón!!! total, no me entiende...". Otro teutón que se pone a hablar contigo: "Ánimo, que ya no queda nada!!" y uno pensando, " y éste, de dónde saca las fuerzas para hablar...?". Replanteamientos de vida en directo: "Y yo, qué hago aquí corriendo...?!". 

Tiempo final estandarizado, ya saben, 1h25', y de vuelta p'al pueblo con cierta desazón y con una nueva compañera de viaje, una mini fisurilla fibrilar en el isquiotibial, que cada vez que salgo a entrenar me dice: "hola!, me puedo ir a correr contigo?!"

Ahora entienden ustedes, queridos lectores surrealistas, porque salgo a correr en plan cebolla ninja todos los días, nieve, llueva, o salga el sol, verdad?. Esto último, ya saben, con muy baja probabilidad:
http://2012alemaniadeleste.blogspot.de/2013/01/alguien-quiere-un-poquito-de-nieve.html

Anelo ver ese número digital mágico en el marcador -1h 24'- en la premier del 2013:
'Halbmarathon de Frankfurt'.

En cualquier caso, terminaré este post de hoy dándole la razón, una vez más, a nuestro querido y sabio refranero popular español, porque, aunque a veces caiga en el olvido, lo importante es participar!

Ya les contaré...


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